El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) es un trastorno común y de larga duración que hace que las personas tengan pensamientos no deseados y realicen comportamientos repetidos. El TOC puede ser difícil de controlar, pero el tratamiento puede ayudar.
Las personas con TOC a menudo son conscientes de que su comportamiento no es racional. Pueden sentirse avergonzados y avergonzados, y con frecuencia tratan de ocultar sus síntomas. Esto puede llevar al aislamiento de amigos y familiares.
Las obsesiones son pensamientos angustiantes, no deseados que ocurren una y otra vez. Algunas obsesiones comunes incluyen:
Miedo a los gérmenes o a la contaminación
Pensamientos sexuales intrusivos sobre otras personas
Miedo a perder el control de su comportamiento
Las compulsiones son comportamientos que una persona se siente impulsada a repetir una y otra vez, en un intento de librarse de la obsesión o reducir la ansiedad causada por ella. Algunas compulsiones comunes incluyen:
Lavado o limpieza excesivos
Pasar mucho tiempo arreglando objetos de cierta manera o de acuerdo con ciertas reglas (como poner todos los cubiertos en el lado derecho del plato)
Contar cosas (a veces llamado “pensamiento mágico”)
Repetir acciones rutinarias como caminar alrededor de una cuadra varias veces para “evitar” que sucedan cosas malas
El tratamiento para el TOC implica medicación y/o terapia cognitivo-conductual (TCC) y puede ser altamente efectivo para reducir los síntomas, aunque la recuperación completa puede llevar algún tiempo.